Nuestros dirigentes, nuestras Fuerzas Armadas Revolucionarias, nuestro Minint el pueblo cubano en general enfrentan diariamente con decisión y firmeza cada tarea, por difícil y peligrosa que esta sea. Tienen un solo propósito: resolver el problema. Son fuertes y enérgicos en su empeño estos hombres y mujeres que enfrentan el peligro, ofrecen sus vidas si es necesario para salvar las de otros. Por eso Cuba VENCE y el pueblo digno, formado en valores, resiste y cree en ellos con la confianza de que siempre venceremos.
Los enemigos permanentes buscan entorpecer, cambiar la realidad de lo ocurrido en su afán de destruir y desmoralizar a nuestro sistema. Equivocados como siempre muerden el polvo de su derrota. Los TITANES cubanos siguen al frente, luchando y superando las dificultades. Mataceros hermanos, no dejen que los confundan. Tengan fe y confianza. Saldremos adelante.
Es necesario captar el mensaje que el Ché utilizaba en su bregar y: «En los momentos más azarosos de la vida, por favor, no perder la ternura». La inteligencia del pueblo de Cuba potenciará la solución de los daños causados por el suceso ocurrido en este territorio. Mucha calma y confianza.
