Mensaje a todos los revolucionarios

Estudiemos siempre las enseñanzas de la historia, fortalezcamos incansablemente la unidad de todo el pueblo y su confianza en sus fuerzas para vencer cualquier obstáculo, la capacidad de detectar, criticar y enmendar cualquier error o distorsión en la aplicación de las políticas aprobadas para beneficio de todos.
Cuidemos, como la “niña de nuestros ojos» la tradición de lucha de nuestro pueblo y la ideología que nos permite «sembrar ideas y conciencia revolucionaria», enseñar al pueblo que «sólo la claridad de las ideas que defendemos actúa como brújula de los intereses y anhelos populares de justicia social, provenientes de la esencia clasista de la alianza estratégica de los obreros con los campesinos, con los intelectuales, con el sector social de los trabajadores y el sector no estatal, todos unidos en el frente inexpugnable de la Revolución Socialista.
Jamás podemos olvidar que esta es «la Revolución de los humildes, con los humildes y para los humildes», de hombres y mujeres, viejos y jóvenes, de fundadores de la Revolución y de sus continuadores, sin distinciones que no sean sólo las que cada persona asume en su trayectoria de vida.
Hay que cultivar el amor por el trabajo creador y honesto, la cultura, los mejores valores humanos, la disciplina social, el respeto de las leyes y de las autoridades que cuidan el orden y la tranquilidad ciudadana apostando a por una vida mejor para todos.
La vanguardia política de la Revolución es el Partido. En él está depositada la confianza del pueblo, y este, a su vez, le tributa al Partido, por ser «el alma de la Revolución» y la guía de la construcción del socialismo, sus más abnegados hijos.
En la solidaridad se ejerce la vocación internacionalista del pueblo y la esencia internacional del proletariado mundial para ayudarse mutuamente y juntos construir un mundo mejor posible para toda la humanidad.
Es por todo esto y más que los cubanos estamos unidos, firmes y en resistencia creativa ante las agresiones del Imperialismo yanqui, seguros que, pese a los desafíos, las carencias de productos, los elevados precios de esta incómoda crisis económica saldremos victoriosos.