Los derechos humanos en peligro: Un llamado a la preservación de la dignidad y la paz mundial

Los últimos días han sido todo un desafío para la supervivencia del ser humano. La vida de miles de personas ha estado en constante riesgo debido a los deseos imperialistas de unos pocos que buscan tener el control absoluto de este planeta y de aquellos que lo habitan.

Se viven tiempos en los que los derechos humanos se respetan y se ponderan en discursos políticos vacíos, muy acordes a lo planteado en la Carta Magna de las Naciones Unidas (ONU), pero que son rápidamente olvidados en conveniencia de intereses geopolíticos.

¿Qué son los derechos humanos? Son los derechos inherentes a todos los seres humanos, sin importar su raza, género, religión, nacionalidad o cualquier otra condición. Estos son fundamentales para el desarrollo de una vida plena y digna.

De la preservación de estos depende el desarrollo de una sociedad mundial justa y equitativa. Pero esto es imposible en un mundo donde los poderosos se creen con el derecho de jugar con la vida de seres humanos con el fin de conseguir sus objetivos.

Si queda alguna duda sobre cómo se violan constantemente los derechos humanos en el mundo, basta con ver lo que está sucediendo en la franja de Gaza, donde el gobierno israelí ha asesinado a más de 3.450 palestinos.

Este conflicto, que data de finales del Siglo XX cuando se conformó el Estado de Israel, alcanzó su punto más álgido este martes cuando el gobierno judío atacó el hospital de la Franja de Gaza, Al Ahli al Arabi, donde se encontraban cientos de heridos afectados por bombardeos anteriores.

La dignidad humana de los habitantes de Gaza es irrespetada constantemente por una nación que dice representar a un pueblo que fue víctima del crimen más atroz de la historia, el Holocausto.

¿Dónde están los encargados de velar por que se respeten los derechos humanos? El Secretario General de la ONU, Antonio Guterrez, ha llamado a un alto al fuego inmediato en Medio Oriente, pero sus palabras parecen haber caído en oídos sordos.

Este mundo parece ir cada vez más a la deriva y los más poderosos, en lugar de encaminarlo, lo empujan más cerca del Armagedón. Algunos especulan que es cuestión de tiempo que se pulse el botón atómico y cuando eso suceda, ya no habrá vuelta atrás.

Para evitar la destrucción de este planeta al que todos llamamos casa, es imprescindible respetar los derechos humanos, llegar a consensos y abogar por soluciones pacíficas a los conflictos.