El declive y la caída de un imperio
Hoy en las noticias estaba leyendo algo que casi me deja perplejo. El medio se refería a que, y cito:
«Los ciudadanos de Estados Unidos baten dos récords al mismo tiempo:
—Jamás había habido una deuda en tarjetas de crédito tan alta.
—Jamás había habido unos ahorros tan bajos.»
Algo que me hizo reflexionar y buscar datos actualizados, análisis de prestigiosos economistas y poder afirmar junto a estos que el sistema económico estadounidense está a punto de explotar. Solo hace falta saber cuándo. Mientras, repasaremos algunos datos y explicaremos algunas cosas aquí les van:
Con respecto a la nota que emitía este medio, se refiere a que las personas se vuelven más vulnerables a la insolvencia, lo que puede provocar la pérdida del hogar, bienes y empleo. A medida que la deuda aumenta, las personas tienen menos dinero disponible para gastar en bienes y servicios, lo que puede desacelerar la economía. Un gran número de personas que no pueden pagar sus deudas puede desestabilizar el sistema financiero, generando una crisis similar a la de 2008, recordemos que ésta es la cifra que representa la deuda nacional de EEUU $ 35.353.819.334.163.
Ahorros mínimos
Causas: El dinero ahorrado pierde valor con la inflación, haciendo que los ahorros sean menos atractivos. La incertidumbre económica y la posibilidad de perder el trabajo pueden llevar a las personas a usar sus ahorros para cubrir gastos esenciales. La falta de confianza en la economía y en el futuro puede llevar a las personas a gastar sus ahorros en lugar de invertirlos.
Consecuencias: Las personas que tienen pocos o ningún ahorro se vuelven más vulnerables a las crisis económicas, ya que no tienen un colchón para afrontar imprevistos. La falta de ahorros puede llevar a las personas a gastar más de lo que ganan, lo que puede aumentar aún más la deuda. Unos niveles bajos de ahorro pueden dificultar la inversión empresarial, lo que puede frenar el crecimiento económico.
El sistema al borde del colapso
Implicaciones: La combinación de una deuda récord y unos ahorros mínimos crea una situación de gran riesgo para la economía global, y especialmente la norteamericana. Si las personas no pueden pagar sus deudas, puede desencadenarse una crisis financiera, con consecuencias graves para la economía global.
Factores que podrían desencadenar la crisis: Un aumento de las tasas de interés podría hacer que las deudas sean más caras, lo que podría llevar a un aumento de los impagos.
El gran miedo, una recesión económica podría generar más desempleo y más dificultades para pagar las deudas. Una guerra comercial con otros países podría dañar la economía estadounidense y aumentar la incertidumbre, este, en gran medida, es un efecto generado por la política promovida en el periodo de Donald Trump, quién dio la sensación de bonanza (2017-2021). En este período oscuro, la reducción de impuestos para empresas y particulares, sin recortes de gastos, contribuyó significativamente al aumento de la deuda pública. Esto podría haber impulsado el consumo en el corto plazo, pero a largo plazo, aumentó la carga fiscal sobre las generaciones futuras.
La reducción de impuestos benefició principalmente a las personas de mayores ingresos y a las grandes empresas, lo que exacerbó la desigualdad en Estados Unidos, situación que ha dado paso al desarrollo de la concepción del supremacismo (ojo con esto).
Al tener más dinero disponible, las personas podrían haber sido menos incentivadas a ahorrar, lo que pudo contribuir a los bajos niveles de ahorro.
Las guerras comerciales con China y otros países provocaron un aumento en los precios de los bienes importados, lo que incrementó el costo de vida para los consumidores y los obligó a recurrir al crédito.
La incertidumbre en el comercio internacional pudo haber afectado negativamente a algunas empresas y generar pérdida de empleos, lo que presionó a los trabajadores a usar sus ahorros para cubrir sus necesidades básicas.
La guerra comercial generó un clima de incertidumbre en la economía, lo que pudo haber disuadido a las empresas de invertir y crecer, impactando negativamente en la creación de empleo y el aumento de los salarios.
La desregulación financiera implementada por Trump pudo haber incentivado a las instituciones financieras a otorgar más crédito, facilitando el acceso a tarjetas de crédito y el endeudamiento, sin una supervisión adecuada.
La pandemia de COVID-19, que comenzó durante la presidencia de Trump, también tuvo un impacto significativo en la economía estadounidense, aumentando el desempleo y la incertidumbre, por igual la utilización de los ahorros al reducirse los empleos.
Las políticas monetarias de la Reserva Federal, que redujeron las tasas de interés, también pudieron haber incentivado el consumo y el endeudamiento.
Si Kamala Harris utiliza estos elementos bien fundamentados Donald Trump no le resiste el primer debate televisivo.
El próximo gobierno tiene un rol crucial en la gestión de la deuda y los ahorros, por tanto. Políticas fiscales y monetarias inteligentes pueden ayudar a controlar la inflación, fomentar el ahorro y evitar una crisis financiera, pero, la situación que ilustras en el gráfico de los Estados Unidos plantea un riesgo real de crisis económica con alcance global y efecto dominó.
El aumento de la deuda y la disminución de los ahorros son señales de alarma que deben tomarse muy en serio. Reitero, el capitalismo como lo conocemos tiene los días contados a EEUU como imperio le espera la decadencia total.