Diletantes

Esta tarde un par de “hijos del arco del triunfo” me pidieron entre risas y un poco de sal que escribiera sobre “los diletantes” en las redes sociales cubanas.
Imagino que es por la cantidad de textos que han surgido al calor de la bancarización en Cuba, donde hoy cualquiera se aboga el derecho (y el izquierdo que siempre es más pequeño) de evaluar, criticar, contraponer y hasta superar el trabajo de equipos de profesionales que andan tras la solución de los problemas que surgen al calor de los retos económicos.
Estos diletantes —sabelotodo— no solo enturbian el escenario, también crean situaciones de descrédito, dudas, devaluaciones y hasta llegan a generar depresión y falta de confianza. Lo logran mediante el bombardeo de información, en mayoría de carácter especulativo, faltos de fundamento y loque es peor, de información actualizada.
Como diletante que también soy, y para no pecar de hablador de bagazo hice una búsqueda en internet y de allí el siguiente resumen:
Conceptualmente, un diletante es una persona aficionada o interesada en una amplia gama de temas o áreas del conocimiento, pero que no se dedica de manera profesional o formal a ninguna de ellas.
Por regla un diletante suele ser alguien que busca conocimientos o experiencias en distintas disciplinas sin especializarse o profundizar demasiado en ninguna de ellas.
El término «diletante» también puede implicar cierta connotación de superficialidad o falta de compromiso en comparación con aquellos que se dedican de manera profesional o experta a un campo específico. Un diletante tiende a explorar diferentes áreas del conocimiento de manera más informal y por pura curiosidad o entretenimiento, sin la intención de convertirse en un experto o dedicarle gran parte de su tiempo y esfuerzo.
Los diletantes pueden, en ocasiones, causar daños potenciales ante ciertas situaciones, por ejemplo:
Pecan de superficialidad: Debido a la naturaleza diversa de sus intereses, los diletantes pueden tener una tendencia a abordar los temas de manera superficial y a no profundizar lo suficiente en ninguna área específica. Esto puede llevar a una comprensión incompleta o inexacta de los temas tratados y a la difusión de información errónea.
Padecen de falsa autoridad: Los diletantes pueden presentarse a sí mismos como expertos en un tema, incluso cuando no tienen una formación o experiencia sólida en esa área en particular. Esto puede generar confusión y llevar a otros a confiar en información incorrecta o de baja calidad.
Generan riesgo en asesoramiento o decisiones importantes: Si los diletantes intentan brindar asesoramiento o influir en decisiones importantes basándose en un conocimiento superficial, pueden poner en peligro los resultados o generar consecuencias negativas. En contextos donde se requiere una experticia sólida y especializado, es importante contar con información precisa y basada en evidencia.
Gozan la desacreditación de profesionales: En algunas ocasiones, los diletantes pueden desacreditar o menospreciar el trabajo y la experiencia de profesionales especializados en un campo. Esto puede socavar la importancia de la formación, la dedicación y el conocimiento especializado que se requiere en ciertas áreas.
Ojo, no todos los diletantes tienen impactos negativos.
Muchos pueden aportar nuevas perspectivas, ejercitar su curiosidad y generar interesantes ideas interdisciplinarias. Sin embargo, es fundamental que los diletantes reconozcan sus límites y estén dispuestos a aprender y escuchar a los expertos cuando se enfrenten a temas complejos o críticos.
En última instancia, es responsabilidad de cada persona que consume “el producto intelectual” emitido por un diletante evaluar críticamente la información recibida y buscar fuentes confiables y expertas en temas específicos. Siempre es recomendable consultar a profesionales y expertos calificados cuando se requiera información precisa y decisiones importantes estén en juego.
A mis dos colegas “hijos del arco del triunfo” aquí les dejo una aproximación al tema, pero como también soy diletante empedernido, les sugiero triangulen, contrasten y comprueben.