Cecmed alerta por medicamento falsificado: Riesgo para la salud pública
El Servicio de Información de Medicamentos del Cecmed emitió el comunicación de riesgo No. 18/2023, durante el mes de junio se han recibido en el dos notificaciones relacionadas con el producto atribuido al fabricante Stada.
El medicamento fue obtenido a través del mercado informal proveniente de Haití; tras ser analizado, teniendo en cuenta las evidencias fotográficas y la definición de la OMS, se determinó su falsificación por lo cual no se pueden garantizar su calidad, seguridad y eficacia.
El Cecmed apunta que su utilización constituye un riesgo inaceptable para la salud de la población, por lo que no se recomienda su uso bajo ninguna circunstancia.
Entre los criterios usados para determinar y demostrar la falsedad de este medicamento se encuentra que el ketotifeno stada 1 mg es un producto del titular Stadapharm, Alemania, que se presenta en cápsulas duras, no en tabletas.
Además, el número de identificación NCD, único para los medicamentos registrados en Estados Unidos, siempre impreso en la etiqueta, no se encuentra en el Directorio NCD de ese país.
El número mostrado en las etiquetas del código de barras no se encuentra en la base de datos internacional correspondiente.
¿CÓMO IDENTIFICAR LOS MEDICAMENTOS FALSIFICADOS?
El Cecmed indica como medicamentos falsificados aquellos a los que se les tergiversan deliberada o fraudulentamente su identidad, composición u origen.
Estos suelen producirse en malas condiciones, sin la higiene adecuada y con intervención de personal no cualificado. Pueden contener impurezas desconocidas o incluso estar contaminados por bacterias, por lo que no se garantizan su calidad, seguridad y eficacia.
A menudo están diseñados para que parezcan idénticos a los productos genuinos, por lo que son muy difíciles de detectar.
Según la institución científica, se pueden identificar a través de las siguientes acciones:
- Examinar el estado del envase y si tiene errores gramaticales o de ortografía.
- Comprobar las fechas de fabricación y caducidad, verificando que los datos del envase exterior se corresponden con los del envase interior.
- Comprobar que el aspecto del medicamento no está afectado, por ejemplo, no muestra cambios de color, signos de degradación ni olores extraños.
- Consultar cuanto antes con el médico, el farmacéutico u otro profesional sanitario en caso de sospecharse que el producto no está actuando como debiera, o de haber sufrido una reacción adversa.
- Notificar los productos médicos sospechosos a la autoridad reguladora de medicamentos (Cecmed).