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Cuba. Un golpe blando fallido

El 11 de julio, la gusanera y sus falsos símbolos

Los gusis se revuelven fácil. No hay que darles un dedo para que se cojan la mano completa, como se dice en buen cubano. No es necesario, ni siquiera, decirles una verdad para que se ensañen con ella. Si no la hay, inventan sus propias mentiras.

Puede ser que hasta se las crean. Todavía siguen repitiendo que durante julio del año pasado, y de forma permanente en Cuba, las fuerzas del orden público reprimieron “protestas pacíficas”. Ahí están los videos de los “pacifistas” volcando patrullas, asaltando tiendas, con palos y piedras, pero ellos siguen en las mismas. Responden a la intención premeditada de divulgar información tergiversada.

Ahora, un año tras los disturbios, se llenan la boca de consignas para “atacar a la dictadura”. Convocan a nuclearse desde “el exilio libre” para conmemorar un año de este falso hito de libertad.

Navegando por las redes sociales es fácil encontrarse con perfiles y páginas que solo se dedica a destilar veneno contra el proyecto revolucionario. Nos llegan algunos de estos llamados impopulares desde España y Canadá, por ejemplo. Ahí están las cuentas de Lázaro Mireles (@lachy77) convocando a reunirse frente a las embajadas de Cuba en Chile, Madrid, Alemania y Uruguay. Se suman Efrén Pulgarón, Ana Olema, Zaid Cuba…los odiadores tienen muchas cuentas y pocas caras.

Ellos van a lomos de su discurso reaccionario, no hay quien los pueda bajar, ni con una tonelada de razón en la mano. Pero nosotros, desde acá, seguimos apostando por la paz, por el amor, en contraposición al odio. No nos encargamos de inventar pretextos, ni a engañar a dos o tres transeúntes para plantar un coro frente a una sede diplomática. Alrededor del mundo, los amigos de Cuba siguen demostrando que somos más. Ahí está el reto de #SacaTuPuloverComunista, que ha alcanzado a muchísimas personas. En Madrid y Barcelona, donde quieren montar parte del espectáculo, ya hermanos solidarios han convocado a mítines durante el fin de semana y el lunes.

La paz y la verdad siguen siendo patrimonio de los revolucionarios. No importa cuánto se empeñen otros en sabotearlo, julio seguirá siendo para Cuba un mes de alegría.

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