El consultor Jeetkumar Gordhandas prometió a un alto funcionario del Banco Nacional de Cuba pagarle 25 mil libras esterlinas por efectuar la cesión de derechos contractuales de la deuda pública cubana, por la cual dicho ente demanda en estos momentos al Estado antillano en la Alta Corte de Londres.
Según trascendió ayer en la declaración de Raúl Olivera Lozano, antiguo director de operaciones de la institución bancaria, incumplió con «su deber y responsabilidad» de acreditar las diligencias con el Ministerio de Finanzas y Precios para mantener «contento» al representante del fondo buitre, con el fin de recibir beneficios económicos.
En testimonio por medio de videoconferencia desde La Habana, Olivera Lozano señaló una serie de irregularidades formales en la emisión de los documentos asociados a la operación legal, que eliminan su validez. «No podíamos cerrar la cesión sin la confirmación del avalista», que en este caso sería el gobierno cubano, declaró el ex directivo.
Regulaciones internacionales establecen que, de mediar actos de corrupción en este tipo de transacciones, son declaradas nulas de pleno derecho. En la actualidad, Olivera cumple condena por las violaciones cometidas durante el proceso.
El Banco Nacional de Cuba y el Estado caribeño no reconocen al fondo buitre como acreedor de las deudas en cuestión, por los procedimientos ilegales empleados para la supuesta obtención.
La audiencia iniciada este lunes sesionará durante dos semanas, en las que se incluirán la práctica de pruebas y los informes finales de las partes, previstos para los días 1ro. y 2 de febrero.
