Para comprender cómo ha podido atender a pacientes enfermos con el virus SARS-COV-2, un hospital especializado en ortopedia, el Complejo Científico-Ortopédico Frank País, conversamos con su director desde hace tres años, el Dr. Roberto González Martín:
“Sabía lo que podía venir; pero nunca pensé que pudiéramos hacerlo de la manera tan rápida en que se hizo…le dimos tareas a todo el mundo predicando con el ejemplo, trabajando y embullando a la gente… y los pacientes con mucha fe en el futuro, no hemos tenido una queja, una insatisfacción, ha sido un trabajo que la gente lo ha asumido.
Momentos tensos si te puedo decir que han existido, yo creo que todos los días son momentos tensos, sobre todo para mí los momentos tensos han sido tener los pacientes graves, por ejemplo, tuvimos una paciente que estuvo muy complicada y al final falleció, hizo una insuficiencia renal, hubo que montar un riñón artificial para hacerle diálisis peritoneal, en un hospital que no tenía antecedentes de haber hecho una diálisis en ningún otro momento, entonces, contamos con la ayuda y colaboración del Instituto de Nefrología, los especialistas de allí, el propio profesor Guillermo, su director, hemos tenido la colaboración incluso para los momentos más difíciles de todo el mundo, del director del IPK (Instituto de Medicina Tropical Pedro Kourí), el director del Hospital Hermanos Amejeiras, la integración que hemos tenido con la dirección provincial de salud para resolver los problemas, ha habido momentos tensos; pero se han resuelto los problemas con esta forma de integrar, conversar, incluir, intercambiar.
Hemos sentido también la satisfacción de que un paciente se ha recuperado de terapia intensiva, verlo crítico e inestable y después verlo crítico, y luego grave e inestable y después grave, hasta que nos dijeron que ya no estaba entubado y verlo finalmente de alta, con un gran nivel de agradecimiento al equipo que a lo atendió, a la gente, a la Revolución, eso también te da mucha fuerza y estímulo.
El inicio implicó acostumbrarnos a una tarea tan nueva y dinámica, hubo algunos desajustes en el traslado de pacientes, la llegada, la salida, que también se fue con el tiempo resolviendo. No nos ha faltado un medicamento, un insumo, lencería, ropa verde, sobrebatas, nasobucos, no nos ha faltado comida, al contrario, para pacientes y para trabajadores… y yo creo que hay un alto nivel de compromiso de manera general, la gente se ha comportado a la altura de nuestro pueblo.
Ya yo estoy en la época de mi tercera edad, con mucho trabajo en el sector, de muchos años, tengo muchísimas anécdotas en este hospital y de la salud pública de nuestra Revolución, tengo la concepción de cada cosa de lo que dijo Fidel, de aquello, de esto, de cada momento, lo que escribió hace años para hoy y para los que vienen detrás de nosotros. Voy a seguir diciendo siempre, hasta que deje de existir: somos lo que somos, gracias a Fidel y a lo que nos enseñó el tiempo que estuvo con nosotros.
Hay anécdotas de esas 54 veces que Fidel estuvo aquí, lo que dijo en cada momento…tengo la satisfacción en estos últimos años de ver cómo nuestra gente rompió el récord de operaciones realizadas en este hospital, el año pasado hicimos seis mil operaciones, seis mil cirugías mayores, nosotros en estos momentos estábamos operando más de 120 cirugías mínimamente invasivas todos los meses, eso es un récord roto por este hospital, gracias a las técnicas nuevas y novedosas introducidas en el hospital”.
